“El señor Brignole está rompiendo la
conciliación al enviar cédulas a nuestros delegados, amenazándolos con la quita
de tutela sindical, descontando salarios, y al ordenar cambios en las tareas habituales de
los delegados, degradándolos, y ejerciendo la persecución sindical. El acta
firmada el día 8 de mayo es totalmente clara en cuanto a la medida administrativa
de No Innovar (artículo 10 de la Ley 14.786), que ordenan el cese de toda
medida que signifique la afectación de los derechos de los trabajadores y la
prestación del servicio. El Ministerio de Trabajo debe actuar de forma
inmediata ante esta violación a la ley. Nosotros como gremio hemos respetado a
rajatabla la conciliación pero la patronal está ejerciendo un abuso que no
vamos a tolerar” advirtieron desde ATE.
La mesa de conciliación entre las
partes, comenzó el 14 de mayo y fue precedida por 40 días de huelga por parte
del gremio, luego de que el delegado Gustavo Ortiz fuera salvajemente agredido
en su lugar y horario de trabajo, hecho por el cual el presidente del Mercado
Central, literalmente “se lavó las manos” pese a la gravedad extrema del hecho.
Durante los días de paro, se
conocieron graves denuncias en cuanto a las condiciones laborales de los
trabajadores del Mercado, incluyendo riesgo para la integridad física y sexual
de trabajadoras.
Desde el cuerpo de delegados pidieron que el
Ministerio de Trabajo actúe con “máxima seriedad y autoridad” ante el desacato
de la patronal al incumplir los términos de la conciliación e indicaron que la
persecución hacia los trabajadores “es muy grave”.
Por su parte, el Secretario General de
ATE Misiones, César Fariña, expresó que la conducta del presidente del Mercado
Central “es profundamente antidemocrática” y exigió a las autoridades del
Ministerio de Trabajo “que se respete debidamente lo acordado, ya que nosotros
como sindicato hemos respetado la conciliación. Llegamos a esta instancia luego
de que a uno de nuestros delegados casi asesinan dentro del Mercado. Nuestras
compañeras cuentan que trabajan bajo constantes violencias. Los delegados están
reclamando salarios y condiciones de
trabajo desde hace mucho tiempo. Por eso Brignole no quiere al sindicato
adentro, porque no quiere que los trabajadores reclamemos derechos. Es una
persecución sindical para acallar y aplastar los derechos y manejar el Mercado
como patrón de estancia. Por eso le pedimos al Ministerio de Trabajo una
inmediata acción para poder sostener esta mesa conciliatoria que tiene como
objetivo la resolución del conflicto. No se puede permitir que la patronal siga
haciendo lo que quiere e incumpliendo la ley”.
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