“Estamos en lucha porque se vienen
arrastrando incumplimientos desde el año pasado. Y en el caso de pases a
plantas permanentes, hace 5 años que no se dan. Pedimos equiparación salarial,
recomposición salarial porque con lo que ganamos no nos alcanza ni para lo
básico. Esto ya se había planteado en varias ocasiones y no se vio
plasmado. A los monotributistas le
habían prometido un aumento del 10 que tampoco se cumplió. Se solicitó un
ticket canasta para compensar el salario de quienes están en planta, se firmó
un acuerdo, pero tampoco se cumplió. Ya nos cansamos de que se sigan dilatando
los acuerdos” sentenciaron desde el cuerpo de delegados.
“En promedio los sueldos oscilan
entre 12 y 14 mil pesos, muy por debajo de lo que necesita un trabajador para
sostener a su familia y hacerle frente a los costos de estos tiempos, donde los
tarifazos y la inflación están a la orden del día. La mesa de diálogo con la
patronal se abrió en septiembre del año pasado y no se ha respetado lo
acordado. También hay incumplimiento son respecto a la indumentaria, que
debería entregarse indumentaria nueva dos veces al año” añadieron.
Por su parte, César Fariña,
Secretario General de ATE Misiones, indicó que “este es el segundo destino
turístico de la provincia, por donde pasan miles de visitantes de distintas
partes del mundo. Estas trabajadoras y trabajadores que hoy están reclamando
con todo derecho que se cumpla con las mejoras salariales y laborales
acordadas, son quienes nos representan ante los ojos del mundo, en este
patrimonio de la humanidad. No puede ser que no les alcance para llegar a la
canasta familiar o que tengan que trabajar con indumentaria en mal estado”.
Fariña agregó que “de no mediar
soluciones inmediatas, se van a profundizar las medidas”. Así mismo, el titular
de ATE rescató “la unidad en la lucha plasmada hoy aquí en el marco del paro de
ATE, con sectores de la economía popular, gracias a la presencia de la CCC y la
CTEP”.
Graciela de Melo, referente de la
Corriente Clasista y Combativa, expresó que el reclamo de las trabajadoras y
trabajadores de Ruinas “es totalmente justo y entendible”, y subrayó que “este
modelo se está llevando puesta las conquistas de nuestro pueblo, y destruyendo
las economías populares y de las familias. En las redes dicen que quien es
reclamamos nuestros derechos somos vagos, planeros, pero lo cierto es que toda
reivindicación de los trabajadores comienza desde abajo, desde el barrio, desde
la fábrica, o desde sectores del Estado como éste. Siempre es el trabajador el
que paga el ajuste. Un trabajador hoy no debería ganar menos de 26 mil pesos;
sin embargo tenemos compañeros de las economías populares que tienen que
sobrevivir con 6 mil pesos por mes, esto tenemos que revertirlo y solo es
posible en la calle y en unidad”.
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