(Agencia
de Noticias ATE Misiones). En la mañana de este martes 28 de noviembre,
trabajadores y trabajadoras del Ministerio del Agro y la Producción,
acompañados por integrantes del Consejo Directivo Provincial del sindicato, se convocaron en una asamblea a través de la
cual volvieron a dar visibilidad al conjunto de reclamos salariales y laborales
que vienen sosteniendo desde hace un largo tiempo.
“Hoy
son varios los puntos que estamos pidiendo. Desde lo salarial, debemos decir
que hoy por hoy tenemos el peor salario de toda la administración central en la
provincia de Misiones” enfatizó Marcelo Manfredini, delegado de ATE en el
sector.
Otro
de los ítems que se reclaman es el pase a planta permanente de seis
trabajadores que se encuentran desde hace varios años desarrollando sus tareas
en un marco de precarización laboral. “Son compañeros en promedio con 15 años
de antigüedad que están contratados; pedimos la urgente estabilidad laboral
para ellos” indicó el delegado.
Organizados
en ATE, los trabajadores del sector vienen manteniendo una mesa de diálogo
desde hace 3 meses con el ministro del Agro José Luis Garay y el ministro de
Hacienda Adolfo Safrán, pero de este espacio solo surgieron dilaciones y “promesas
que nunca se cumplen”.
ATE
reclama además la recategorización de personal que en algunos casos llevan
décadas sin ser recategorizados. Es el caso de la trabajadora del área
Patrimonio, Celia Correa, quien relata que “trabajo hace 30 años, y estoy en la
misma categoría desde siempre. Y así hay muchos compañeros”.
La
cuestión salarial es apremiante y lleva a los trabajadores de mayor edad a
seguir cumpliendo tareas pese a estar en
condiciones de jubilarse. “Acá en el Agro los trabajadores de categoría 21
tienen un sueldo básico de hambre, actualmente de 1180 pesos, por eso vienen
compañeros a trabajar rengueando, muy viejitos, algunos se han muerto
trabajando. Es lamentable” explicó el Secretario de Organización de ATE
Misiones, Ismael Benítez.
También
forma parte del reclamo, el pago del 6% que el gobierno provincial adeuda a los
trabajadores de un aumento rubricado en 2016, la equiparación del sueldo con el
resto de la administración central, el
descongelamiento de la antigüedad, y el pago de lo que corresponde por la
llamada “cláusula gatillo”, que es la
diferencia que deben percibir los estatales por la evolución inflacionaria.
“Estamos
pidiendo además un bono por única vez a fin de año, mínimamente de dos mil
pesos, ante la crítica situación económica de los trabajadores” aportaron desde
el sector.
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