Violencia de género en la Subsecretaría de Cultura: “no me callo más”

(Agencia de Noticias ATE Misiones). En la mañana de este lunes 23 de julio, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE)  junto a mujeres referentes de otras organizaciones, acompañaron a la trabajadora y artista plástica Norma “Noni”Potschka en su reclamo para visibilizar la violencia que padece desde hace varios años como personal de la Subsecretaría de Cultura. La acción se dio en el lugar de trabajo actual de Potschka, el Centro Cultural Vicente Cidade, donde la artista se encadenó a modo de protesta. Paralelamente, el Secretario General de ATE Misiones, César Fariña, junto a un grupo de mujeres militantes, se presentaron en la Subsecretaría de Cultura y en el Ministerio de Educación y Cultura para volver a denunciar la situación y pedir una solución urgente para la trabajadora Potschka.

“Decidí hacer visible este calvario que ya lleva muchos años, en los cuáles sufro todo tipo de violencia y desprecio. Hoy no me callo más y quiero que esto se termine. Agradezco a todas las mujeres y los compañeros que hoy me acompañan” señaló la artista.

Potschka, quien decidió romper un largo silencio, había manifestado que lo que la lleva a abordar esta instancia de visibilización del reclamo es que “desde que en 2007 descubrí y denuncié el robo de un original de Berni en el Museo Yaparí, sufro todo tipo de humillaciones como trabajadora, como mujer y como artista. Desde hace treinta años soy empleada de la Cultura y sigo teniendo la categoría 12, que es la más baja”.

Las organizaciones que estuvieron acompañando solidariamente la acción en el Cidade y la Subsecretaría de Cultura son el Movimiento Evita, Mumalá, Corriente Clasista y Combativa (CCC), Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Corriente Estudiantil Popular Antiimperialista (CEPA)  y Mujerada Misionera

Andrea Dombroski, militante de CEPA, observó que “considerando la Ley 26.485, que es la ley nacional de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia de  género y las relaciones de poder sobre las mujeres, acá planteamos que la compañera Norma Potschka claramente viene siendo víctima de violencia psicológica, simbólica, económica e institucional. Es una compañera a la cual en su ámbito laboral se la ha atacado, se la ha desmoralizado, como profesional se la ha denigrado al no asignarle tareas específicas que tengan que ver con sus capacidades y saberes; desde lo físico se la ha vulnerado también al ponerla a cumplir funciones de sereno en la situación en la que se encuentra. Estamos ante un caso de violencia de género, y por eso acompañamos, ya que además entendemos desde la CEPA, que como estudiantes que nos estamos formando, no estamos exentas de tener que trabajar en dependencias del Estado donde no se valoriza nuestras facultades y no se nos ponga en valor, denigrándonos con tareas secundarias. En el caso de Norma hablamos de una violencia de que lleva años y años. Cuando decimos violencia de género no hablamos solamente de golpizas físicas, sino también de todo esto por lo que Norma atraviesa”.

En tanto, desde ATE informaron que “el Ministerio de Educación y Cultura donde las compañeras volvieron a insistir con la denuncia,  se comprometieron a brindar una respuesta a la brevedad. Nosotros desde lo gremial repudiamos todo tipo de violencia en el Estado contra una trabajadora de la Cultura y en este caso artista, y por eso nuestro acompañamiento y el de las organizaciones aquí presentes”.